The Broken, terror inteligente



Lo peor que se puede decir de "The broken" es que es corta. Sean Ellis usa el ritmo lento, la insinuación en contra del torture porn que tan de moda está en los últimos años (gracias a la saga Saw y majaderías similares) Con una dirección ejemplar, el director de Cashback demuestra que con un poco más de presupuesto es capaz de sacarse de la manga una película inquietante, con referencias claras a Hitchcock (la escena de la bañera es la de "Psicosis" adaptada a nuestro tiempo, sin que quede como una copia cutre como las que han perpetrado Van Sant y Amenabar, por decir dos "prestigiosos" muevecámaras) y con un estilo propio de otro tiempo (no hay teléfonos móviles, pese a que parece que transcurra actualmente)
Puede que Ellis peque de modesto, la historia que nos cuenta se queda un poco pequeña, mientras la estamos viendo da la sensación de episodio de serie de miedo y al final esa sensación se confirma. Ya no porque todo lleve a un desenlace que aunque brillante, todo buen aficionado sabrá ver mucho antes de que ocurra, sino porque la angustia y el miedo cotidiano está tan bien manejado que merecía una mirada más global, que no solo se centrara en la familia protagonista.

Lena Headey está soberbia, contenida y creible. Richard Jenkins y el resto de secundarios funcionan al servicio de la película, sin actuaciones estridentes.

La primera película que nos viene a la mente al ver "the broken" es "la invasión de los ultracuerpos", en cualquiera de sus versiones y es infinitamente mejor que esa tontería con la Kidman y Craig. Puede que la falta de presupuesto fuera determinante a la hora de plantearse una versión más reducida, algo que pese a ser excelente nos sabe a poco.

Comentarios

Mery ha dicho que…
No tenía planeado verla pero tras tu crítica me la apunto;)
jesse_custer ha dicho que…
Ya nos contarás!