Lucky you, vivir para jugar



Curtis Hanson siempre será recordado por la magnífica adaptación de la novela de Ellroy "L.A. Confidential". Las obras del autor son densas, con mucho personajes y tramas paralelas. Hanson supo donde y cuando cortar, si caes en el error de intentar contarlo todo el resultado será un lio de proporciones ilimitadas. DePalma y su ridícula "La Dalia Negra" (dos egos juntos no suelen dar buen resultado).
Después vinieron títulos correctos, sin pretensiones. "Wonder boys" es una película a reivindicar, mejora con cada visionado. "8 millas" se deja ver.

"Lucky you" es la historia de un padre y un hijo enfrentados, de su eterna rivalidad. Las escenas en las que ambos se enfrentan son, sin duda, lo mejor de la película, ver a uno incapaz de vencer al otro, sus reacciones, su respeto, el ir y venir del anillo. Jugadores profesionales que más que jugar para vivir, viven para jugar.
Para llegar a más público hay una historia de amor demasiado forzada, el personaje femenino resta intensidad a la película, su extrema inocencia es un contrapunto demasiado radical con el protagonista. Esto, junto al desarrollo de la trama principal en el segundo acto (esa apuesta de 8 km y 16 hoyos en clave de comedia), hacen que lo que al principio parecía una retrato agridulce del mundo del jugador de poker profesional, se convierta en una fábula de redención. El aprendizaje mil veces visto, tipo carismático y con talento que aprende a controlar sus impulsos y descubre que toda historia tiene dos versiones. Empieza como una película de personajes y acaba como una película con mensaje.

El duelo entre Robert Duvall y Eric Bana es, como mencionaba antes, lo mejor de la función. Choque generacional bien dirigido, Hanson demuestra que es un gran director de actores, hasta hace que la Barrymore parezca menos mala. Como secundarios intrascendentes, Debra Messing y un fugaz Robert Downey Jr.

"Lucky you" es un, como diría el protagonista, un proyecto de algo. Funciona como película de poker, las escenas con cartas de por medio son geniales. Como historia de amor es típica y tópica, no aporta nada al conjunto. Y como duelo padre/hijo es más que interesante, aunque tenga un final tan sopechosamente bien intencionado. A mi me parece una buena mano.

Comentarios