Una pareja que va en coche se desvía de la carretera principal, el tio decide que es mejor tomar un atajo y acaban perdidos. Sí, lo hemos visto tres millones de veces.¿Qué da "Vacancy" para que merezca la pena verla?
Para empezar, la idea no está mal. El matrimonio perdido tiene problemas en el motor y se instala en un motel de aspecto poco recomendable. Ponen la tv y no hay antena, así que prueban con las cintas en vhs que encuentrar al lado del video. Y ven como todos los huéspedes de tan acogedor lugar son torturados y asesinados, mientras la función se graba en multiángulo, gracias a un montón de cámaras instaladas en diversos puntos de la estancia.
Vale. Primer fallo grabe de guión. Si en los asesinatos previos las víctimas son pilladas por sorpresa, ¿son tan tontos los malos como para dejarlos a la vista de cualquiera que alquile la habitación?
Bueno, dejemos pasar eso, es una película y hay que concederle ciertas licencias.
A partir de ahí, asistimos a una persecución cerrada, toda ocurre en el motel. Túneles subterraneos, cabinas de teléfono, camioneros...ingredientes para hacer un film entretenido, con las mínimas dosis de gore (rarísimo en el desmedido cine de género actual) y un estilo corre-que-vienen efectivo.
Kate Beckinsale correctita, al menos en esta no hace de cazavampiros fashion. Alguien debería decirle a esta chica que cambie de agente, porque la única película decente de su filmografía es la comedia "Serendipity". Luke Wilson bien, con esa cara de tonto que aquí pega.
"Vacancy" se deja ver, no cansa. Y se olvida al rato. Una de esas pelis de usar y tirar que de vez en cuando no vienen mal.
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