Apocalypto, narración visual al cuadrado


Mel Gibson es un director que no deja indiferente, o te encanta o lo odias. Es facil cargar contra el, en su vida privada se le ha ido la lengua más de una vez y algunas de sus ideas chocan con las tendencias actuales. A mí personalmente me da igual que en sus horas libres chupe ranas o se vista de foklórica, cada uno puede hacer con su vida y su tiempo lo que le venga en gana. Pero por mucho que digan sus detractores, Gibson es un gran director de cine.
Su debut con "el hombre sin rostro" poco tenía que ver con lo que vendría después, un drama intimista bien contado, que pese a su inocencia supera el tema que trata de forma correcta, unos pasos por encima del telefilm barato.
"Braveheart" comenzó su etapa visual, plantear las imagenes como vehículo de la historia por encima de las palabras. "Apocalypto" lleva esa máxima al extremo.
La película arranca y desde los créditos no para, emprendemos un viaje de sangre en un escenario de salvaje belleza. Desde el ataque a la aldea hasta la llegada a la playa el ritmo es frenético, no deja respiro. El mérito de Gibson es que consigue que no perdamos el interés, que esas dos horas y media pasen como un suspiro. Hay sangre y escenas de extrema crueldad (muy grande el ataque del jaguar y toda la parte final) pero en cosas tan mediocres como "Saw 3" también y ahí parece que al ser cine de terror todo vale, mientras que aquí, que está totalmente justificada hay gente que se escandaliza.
¿"Apocalyto" no tiene guión? Quien afirme eso es que no tiene ni idea de cine, un guión no es solo este-dice-esto-y-luego-este-le-dice-lo-otro. Pasan un montón de cosas y eso está escrito en algún sitio, no creo que Gibson llegara al rodaje y dijera "ummm, ahora vamos a correr todos para allá en taparrabos!!!". Entiendo que la película no guste a todo el mundo, es un cine directo y sin concesiones, pero echarle la culpa al guión es como decir que no te gusta porque hay mucho verde.
"Apocalypto" es la épica llevada al extremo, un tour de supervivencia rodado con maestría que demuestra una vez más lo valiente que es Mel Gibson, atreverse a rodar una película en otro idioma perdido después de "La pasión", sin la carga histórica de esta, es un lujo que en el cine actual nadie más se puede tomar. Y que le sigan criticando.

Comentarios

Unknown ha dicho que…
Completamente de acuerdo, como de costumbre.

Y pregunto: ¿qué hay de malo en que un director sea eminentemente visual?